1.-Exposicion con procesión solemne por sacerdote. (3 min)
2.-Oración inicial por sacerdote (2 min)
3.- Oración Inicial
“¿De dónde le viene a éste esa sabiduría y esos milagros? ¿No es éste el hijo del carpintero?”
Señor Jesús: Nos presentamos ante Ti sabiendo que nos llamas y que nos amas tal como somos. «Tú tienes palabras de Vida Eterna y nosotros hemos creído y conocido que Tú eres el Hijo de Dios» (Jn. 6,69). Tu presencia en la Eucaristía ha comenzado con el sacrificio de la última cena y continúa como comunión y donación de todo lo que eres. Aumenta nuestra FE. Por medio de Ti y en el Espíritu Santo que nos comunicas, queremos llegar al Padre para decirle nuestro SÍ unido al tuyo. Contigo ya podemos decir: Padre Nuestro. Siguiéndote a Ti, «Camino, Verdad y Vida», queremos penetrar en el aparente «silencio» y «ausencia» de Dios, rasgando la nube del Tabor para escuchar la voz del Padre que nos dice: «Este es mi Hijo amado, en quien tengo mi complacencia: Escuchadlo» (Mt. 17,5). Con esta FE, hecha de escucha contemplativa, sabremos iluminar nuestras situaciones personales, así como los diversos sectores de la vida familiar y social. Tú eres nuestra ESPERANZA, nuestra paz, nuestro mediador, hermano y amigo. Nuestro corazón se llena de gozo y de esperanza al saber que vives «siempre intercediendo por nosotros» (Heb. 7,25). CREYENDO, ESPERANDO Y AMANDO, TE ADORAMOS con una actitud sencilla de presencia, silencio y espera, que quiere ser también reparación, como respuesta a tus palabras: «Quedaos aquí y velad conmigo» (Mt. 26,38). Tú superas la pobreza de nuestros pensamientos, sentimientos y palabras; por eso queremos aprender a adorar admirando el misterio, amándolo tal como es, y callando con un silencio de amigo y con una presencia de donación. El Espíritu Santo que has infundido en nuestros corazones nos ayuda a decir esos «gemidos inenarrables» (Rom. 8,26) que se traducen en actitud agradecida y sencilla, y en el gesto filial de quien ya se contenta con sola tu presencia, tu amor y tu palabra. Aprendiendo este más allá de la ADORACIÓN, estaremos en tu misterio. Entonces, nuestra oración se convertirá en respeto hacia el «misterio» de cada hermano y de cada acontecimiento, para insertarnos en nuestro ambiente familiar y social y construir la historia con este silencio activo y fecundo que nace de la contemplación. Gracias a Ti, nuestra capacidad de silencio y de adoración se convertirá en capacidad de AMAR y de SERVIR. Ayúdanos a ser tu Iglesia misionera, que sabe meditar adorando y amando tu Palabra, para transformarla en vida y comunicarla a todos los hermanos. Amén.
TODOS DECIMOS LA SIGUIENTE ORACION
“¡Dios mío! Yo creo, adoro, espero y te amo. Te pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no te aman.” (3 VECES)
Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, te adoro profundamente y te ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los Sagrarios del mundo, en reparación de todos los ultrajes, con los que Él es ofendido, por los méritos infinitos del Sagrado Corazón de Jesús y del Inmaculado Corazón de María, te pido la conversión de los pobres pecadores.
TODOS
Ven Espíritu Santo Ven por medio de la poderosa intercesión del inmaculado corazón de MARIA tu amadísima esposa. . .
Ven Espíritu Santo Ven por medio de la poderosa intercesión del inmaculado corazón de MARIA tu amadísima esposa. . .
Ven Espíritu Santo Ven por medio de la poderosa intercesión del inmaculado corazón de MARIA tu amadísima esposa. . .
CANTO (El Espiritu de Dios esta en este Lugar)
4.-Oración del guía:
Señor, Dios, Padre de Nuestro Señor Jesucristo, que se encarnó en la Virgen María por obra del Espíritu Santo, que padeció y murió en la cruz, y resucitó al tercer día; te rogamos humilde y confiadamente, por tus hijos predilectos: los Sacerdotes, Obispos y por Nuestro Santo Papa Francisco, para que llenados del Espíritu Santo, con sus dones y sus gracias, que obre siempre en ellos y sean verdaderos testigos de tu amor hacia los hombres. Que hagan siempre el bien, que no sean sordos a tu voz, que siempre escuchen tu palabra y la trasmitan fielmente a tu Pueblo. Que no callen ante la maldad en el mundo, ni ante las injusticias. Que caminen siempre por el camino que ́Tú les muestras, para que les vaya bien.
Que guíen a su Pueblo con rectitud de corazón.
CANTO ( Alma Misionera)
5.- Oración e Intención de la Hora Santa
¡Oh Jesús, eterno sacerdote, guarda a tus sacerdotes, al abrigo de tu corazón. Guarda sin mancha sus manos consagradas, que diariamente tocan tu Santo Cuerpo, y limpia sus labios teñidos con tu preciosísima sangre. Guarda puros sus corazones, marcados con el sello sublime del sacerdocio, y no permitas que el espíritu del mundo los contamine. Aumenta el número de tus apóstoles, que tu santo amor los proteja de todo peligro. Bendice sus trabajos, y que el fruto de sus desvelos sean la salvación de muchas almas. Te pedimos que no falte quien lleve los niños a ti, envía operarios a tu mies, Señor para que vean los ciegos del alma y oigan los sordos y resuciten los muertos y se evangelicen los pobres, Señor para que no deje de haber en cada pueblo quien diga a sus moradores: he ahí vuestra madre mostrando a la tuya, Señor para que todos los que sufren vayan a ti y descansando sobre tu pecho encuentren la paz, Señor para que en todo lugar se ofrezca a tu Nombre la limpia oblación de la Hostia pura, santa e inmaculada, Señor para que diariamente se realice tu deseo de que tus discípulos coman tu Pascua y la casa de tu festín esté siempre llena, Señor para que no quede un solo pueblo sin Sagrario y sin sacerdote que lleve sus vecinos a él, Señor para que tu nombre sea santificado. Todo esto para la mayor Honra y Gloria tuya, que con el Padre y el Espíritu Santo vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
6.-Oremos con el Salmo 42-43 (41-42)
2 Como anhela la cierva los arroyos, Así te anhela mi ser, Dios mío.
3 Mi ser tiene sed de Dios,
del Dios vivo;
¿Cuándo podré ir a ver
el rostro de Dios?
4 Son mis lágrimas mi pan
de día y de noche ,
cuando me dicen todo el dia:
¿Dónde está tu Dios?.
5 El recuerdo me llega de nostalgia:
cuando entraba en la tierra admirable
y llegaba hasta la Casa de Dios,
entre gritos de acción de gracias
y el jubilo de los grupos de romeros.
6 ¿Por qué desfallezco ahora y me siento tan azorado? espero en Dios, aun lo alabare:
¡Salvación de mi rostro, 7 Dios mío!
Me siento desfallecer,por eso te recuerdo,
desde el Jordán y el Hermón
a ti, montaña humilde.
9 De día enviara Yahvé su amor,
y el canto que me inspire por la noche será oración al Dios de mi vida.
Canto (Altísimo Señor)
7.-Del Santo Evangelio Según San Mateo 2 13-15 19-23
13 Luego que partieron, un ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: “Levántate, toma contigo al niño y a su madre y huye a Egipto, donde permanecerás, hasta que yo te avise. Porque Herodes va a buscar al niño para matarlo”. 14 Y él se levantó, tomó al niño y a su madre, de noche, y salió para Egipto, 15 y se quedó allí hasta la muerte de Herodes; para que se cumpliera lo que había dicho el Señor por el profeta: “De Egipto llamé a mi hijo”.
19 Muerto Herodes, un ángel del Señor se apareció en sueños a José en Egipto y le dijo: 20 Levántate, toma contigo al niño y a su madre y vuelve a la tierra de Israel, porque han muerto los que buscaban la vida del niño”. 21 Él se levantó, tomó consigo al niño y a su madre y entró en tierra de Israel. 22 Pero oyendo que Arquelao reinaba en Judea en 23 el lugar de su padre Herodes, temió ir allí; y, advertido en sueños, fuese a la región de Galilea. Y llegado allí se estableció en una ciudad llamada Nazaret, para que se cumpliese la palabra de los profetas: “El será llamado Nazareno”.
Palabra del SEÑOR
R=Gloria a ti SEÑOR JESUS
8.- Espacio de silencio simple para reflexionar (2min)
9.- Reflexión: Dios ve el corazón y en san José reconoció un corazón de padre. San José, es custodio de Jesús y de María así como de la Iglesia y custodio de las vocaciones. Su atención en la vigilancia procede de su disponibilidad paraservir. «Se levantó, tomó de noche al niño y a su madre» dice el Evangelio, señalando su premura y dedicación a la familia ¡Qué hermoso ejemplo de vida cristiana cuando nos ocupamos de lo que el Señor nos confía por medio de la Iglesia! Así, Dios derrama sobre nosotros su Espíritu, su creatividad; y hace maravillas. San José es el «hombre justo»,que en el silencio laborioso de cada día persevera en su comunión con Dios. Las primeras palabras que san José escuchó en sueños fueron una invitación a no tener miedo, porque Dios es fiel a sus promesas: «José, hijo de David, no temas». No temas: son las palabras que el Señor no dirige también a nosotros, cuando, aun en medio de incertidumbres y vacilaciones, sentimos que ya no podemos postergar el deseo de entregarle nuestra vida al Señor. ¡Qué hermoso sería si la misma atmósfera sencilla y esperanzadora, impregnara nuestros seminarios, nuestros institutos religiosos, nuestras casas parroquiales! El Señor quiere forjar corazones de padres y madres, corazones sin temor al llamado; corazones abiertos, capaces de grandes impulsos, generosos en la entrega, compasivos en el consuelo de la angustia y firmes en el fortalecimiento de la esperanza.
José Bendito, a quien se le concedió no sólo ver y escuchar a Dios, a quien muchos reyes anhelaron ver y no vieron, anhelaron escuchar y no escucharon; y además llevarlo en tus brazos, abrazarlo, vestirlo, guardarlo y defenderlo.
“San José, custodio y protector de los corazones unidos y traspasados de Jesús y de María Inflama mi corazón para que en él solo reine mi Dios, Jesús, como reinó en tu santo corazón.”
10.-Preces por los Sacerdotes
V. A los que trabajan por la juventud.
R. Hazlos, Señor, instrumentos dóciles de tu Espíritu.
R. Que la comprometan contigo, Señor.
V. A los sacerdotes pobres.
R. Socórrelos, Señor.
V. A los sacerdotes enfermos.
R. Sánalos, Señor.
V. A los sacerdotes ancianos.
R. Dales alegre esperanza, Señor.
V. A los calumniados y perseguidos.
R. Defiende su causa, Señor.
V. A los que aspiran al sacerdocio.
R. Dales la perseverancia, Señor.
V. A todos los sacerdotes.
R. Dales obediencia y amor al Papa, Señor. V. Que todos los sacerdotes.
R. Sean uno, como tú y el Padre, Señor.
Oración
Divino Corazón de Jesús, lleno de celo por la gloria de tu Padre, te rogamos por todos los sacerdotes. Por tu Espíritu Santo, llénalos de fe, de celo y de amor
TODOS DECIMOS LA SIGUIENTE ORACION
¡Oh Jesús, Pastor eterno de las almas! Dígnate mirar con ojos de misericordia a esta porción de tu grey amada. Señor, gemimos en la orfandad. Danos vocaciones, danos sacerdotes, religiosos, misioneros y laicos santos. Te lo pedimos por la inmaculada Virgen María de Guadalupe, tu dulce y Santa Madre. ¡Oh Jesús danos sacerdotes, religiosos, misioneros y laicos santos según tu corazón! Amén.
CANTOS (3)
11.-PADRE NUESTRO Y LETANIAS (5min)
Bendito sea Dios.
Bendito sea su Santo Nombre.
Bendito sea Jesucristo verdadero Dios y verdadero Hombre.
Bendito sea el Nombre de Jesús.
Bendito sea su Sacratísimo Corazón.
Bendito sea su Preciosísima Sangre.
Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.
Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito.
Bendita sea la Incomparable Madre de Dios la Santísima Virgen María. Bendita sea su Santa e Inmaculada Concepción.
Bendita sea su gloriosa Asunción.
Bendito sea el Nombre de María Virgen y Madre.
Bendito sea San José su casto esposo.
Bendito sea Dios en sus Ángeles y en sus Santos.
CANTO
12.-BENDICION FINAL